La calcita dorada es otra de mis piedras estrella, y siempre me
acompaña. Es una gran eliminadora de negatividad y limpiadora de energías.
Cuando estás bajo de energía, te inyecta fuerza y poder,
combatiendo la pereza y la apatía aumentando la voluntad y el desarrollo físico
y personal.
Induce a un profundo estado de espiritualidad favoreciendo
la unión con la fuente, el Yo superior. Es un potente foco de proyección
energética y astral por lo que es muy recomendable para personas que realizan
viajes espirituales, trabajan con reiki o con otros tipos de energía.
Estimula la mente superior, potenciando la inteligencia
emocional. Ayuda a retener la información importante y potencia la memoria.
Si la sostienes entre tus manos, reconstituye y eleva
enormemente tu vibración ya que tiene una energía extraordinariamente
expansiva.
Para las meditaciones lo adecuado es colocarla en el chakra
coronario o en el plexo solar.
Si la pones en algún lugar de una habitación limpiará las
energías negativas y potenciará las positivas.
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